Mis primeros pasos fueron dentro de los tabloides.
Veamos quien busca a quien.
Una persona busca a “Ventura o Buenaventura Barreiro” – que casualidad pensé, el nombre de mi bisabuelo materno es Buenaventura Barreiro.
Terminó la casualidad cuando leí que el mensaje decía que su esposa era Josefa González - el nombre de mi bisabuela. Bien quien era esta persona y cual su mail?
Rufina Maffía y vivía en Lincoln, Provincia de Buenos Aires, aproximadamente a 300 km. de mi ciudad.
Le escribí y la gran emoción fue intercambiar fotografías, ella tenía las de mi bisabuela, ambas teníamos las de una tía bisabuela.
La segunda sorpresa fue cuando Mamen, mi primera hada madrina y yo compartíamos ancestros. Maravilloso…
La tercera, cuando en Reino de Granada pregunte por La Pizarra, pueblo de mis antecesores recién descubierto y Antonio Botello, me paso mis ramas hasta el 1600 y mil anécdotas familiares, guerras moras incluídas. Ya les voy a contar...
La cuarta, un mail, fuera de foros y grupos a mi casilla de correos de JOSÉ AURELIO GARCÍA ARNAU. Decía: estudié los apellidos Cervantes y Galindo por separado pero nunca los encontré juntos (mi tatarabuelo es Cervantes y Galindo).
El hacía mi trabajo en tierra lejana y querida, mis abuelos y mi madre me enseñaron a incorporar tradiciones y amor a su Patria de nacimiento.
De su mano me llegaron los primeros documentos antiguos, tan antiguos que solo quienes los tuvieron en sus manos saben que grande es la emoción de verlos.
Con los pequeños descubrimientos se comprende todo el sentido de la frase:
“La muerte no llega con la vejez sino con el olvido”
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